Cada persona, en su existencia, puede tener dos actitudes: construir o plantar. Los constructores un día terminan aquéllo que estaban haciendo y entonces les invade el tedio. Los que plantan a veces sufren con las tempestades y las estaciones, pero el jardín jamás para de crecer.

miércoles, 25 de agosto de 2010

¿Qué opinas?

Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse